Diario de A Bordo

... El viento es un caballo: óyelo como corre por el mar, por el cielo. Quiere llevarme: escucha como recorre el mundo para llevarme lejos.

Deja que el viento corra, coronado de espuma, que me llame y me busque galopando en la sombra, mientras yo, sumergido bajo tus grandes ojos, por esta noche sola, descansaré ... [Pablo Neruda]

Nos encontramos actualmente en Barcelona

23 mayo 2006

Tránsito

Tras ayudar a recoger las piezas sueltas de nuestro bus a Potosí, visitamos las famosas minas de esa ciudad que en época colonial hicieron de ella la urbe más rica del mundo. La visita fue a la par interesante y deprimente, las condiciones de trabajo de los mineros son lamentables, estimándose que no pueden trabajar en ellas más de 10 años al enfermar de silicosis y poco después morir. En esta mina trabajan también niños, todos sin horario y con salarios ridículos y dependientes del volumen de material extraído. Como visitante, en este lugar eres un cuerpo extraño en medio de un ir y venir de personas sudorosas que mascan coca y beben alcohol de 96 grados para soportar las condiciones de trabajo. Realmente molestas y el único interés que despiertas en ellos se encuentra siempre vinculado con la posibilidad de que consigan de ti la coca, bebida o dinamita que previamente te han invitado a comprar y que supuestamente constituyen elementos imprescindibles para su labor.

El camino nos llevó después a Sucre donde el mayor yacimiento de huellas de dinosaurio del mundo comparte espacio con una cantera de extracción de cemento. Es difícil discernir si invertimos más tiempo contemplando las huellas o evitando ser arrollados por camiones, excavadoras y demás cachivaches infernales.

Salir de Sucre en algún momento se antojó imposible. El paro de los transportistas seguía tras tres semanas de actividad - el gobierno ha promulgado ley que obliga a las empresas transportistas a emitir facturas y a pagar impuestos en función de la cantidad de pasajeros, medida curiosa en un país donde por igual se llenan pasillos y asientos -, las carreteras se encontraban cortadas por vendedores de ropa usada procedente de ayuda humanitaria, en puntos estratégicos del país - la idea era fomentar la industria boliviana de ropa - y el personal del aeropuerto en huelga ya no recordamos porqué .... . Afortunadamente, pudimos recuperar el dinero - la mitad del cual con un billete inservible - de un boleto de bus ya comprado para acabar volando a La Paz. Allí hemos recuperado pasadas y maravillosas memorias de una anterior estancia en la ciudad. También allí fuimos testigos del segundo título de la Champiñons Lig del Barça - imaginaros a Arturo hecho un manojo de nervios y gritando en un bar de La Paz rodeado de guiris y locales ajenos a su sufrimiento culé -.

Hemos cruzamos el lago Titikaka para entrar en Perú y nos hemos establecido en Cuzco, ciudad hermosa aunque ya hiperturistizada y primera línea como destino turístico mundial y eso tiene cosas buenas y cosas malas, siempre según como se mire.